sábado, 27 de junio de 2009



La del arco no nos salió bien.

De muy chiquita tuve una relación que me llenó de frustración. Él, un joven de 19 años, rockstar moreliano, rodeado de groupies de bellas artes, de historia, de filosofía, y por supuesto, yo era una de ellas. Pero yo era diferente, con 15 añitos, mi usual indiferencia obligada por una timidez incurable que siempre me ha acompañado, hizo que este chico fijara su objetivo en mí. Yo caí más pronto de lo que hubiera querido, digo, para seguir en mi papel de “inalcanzable”, y en una de esas tardes memorables, llenas de sensual distancia nos cayó la noche.

Yo estaba dispuesta a pasar por el regaño, pero de ninguna manera dejaría pasar la oportunidad de saber qué era ser una mujercita de verdad. Lo más extraño, era que en un principio no me interesaba tanto “la primera vez” y todo eso, no. Yo pensaba en que por primera vez iba a entrar al mundo de los hombres; muchas veces sentí esa sana envidia por no poder saber lo que era disfrutar de las mujeres, sinceramente siempre me han parecido hermosas; pues esa noche sabría cómo un hombre toca a una mujer, qué le dice, cómo cambia su semblante al tenerla desnuda, y todo eso….Al final fue todo muy chistoso e inesperado (claro visto desde aquí). El rockstar se arrepintió justo cuando yo tenía mi corpiñito 34B (ha crecido eh¡¡) en el suelo, me dijo que yo era sólo una niña, que era menor de edad y que esto podría ser un verdadero problema que truncara en el futuro su exitosa carrera de baterista de Santa Sabina. Claro que para ese momento yo ya no pensaba en penetrar en el mundo de los hombres, sólo pensaba en que su mundo me penetrara, bueno, ya ni su mundo, su ciudad, su colonia, su callecita, su cuartito, lo que fuera……………así tuve que conformarme con unos besos, muy buenos sí, pero no dejaron de ser un premio de consolación. Yo tuve que esperar dos añitos y cuando el momento llegó resulté una fierecilla, sí. Dejé al hombre todo arañado tratando de hacer un perfecto arco, o algo así, pues teníamos las fotos del Kamasutra y queríamos seguir todo al pie de la letra, pero bueno, yo, una pobre muchachilla inexperta y él, sólo con la experiencia de sus manuales, salimos medio arañados.

El sacrificio

El instinto no tiene memoria

¿Será acaso la Estática Heracliteana una disciplina inútil? Bueno, empezando por donde se debe. ¿Qué demonios es esto?, ¿existirá tal disciplina?
Yo muy poco he leído a U. Eco. Román parece ser un obsesionado con él, y eso me gusta a pesar de que muchas veces no entiendo nada de lo que me platica, me gusta su pasión. Me interesó el tema a pesar de que eso mismo hizo que no habláramos de nosotros. Entendí lo que había debajo de sus palabras: Yo.

Ahí ando siempre, flotando en sus pláticas con otras mujeres, metida en sus sueños con otros rostros, escondida entre sus palabras. Yo soy el mensaje oculto que aparece cuando se toca el disco al revés, y estoy tan loca que eso me complace.

Dice Román que dice Heráclito que “Nadie puede bañarse dos veces en el mismo río” No, porque nunca somos los mismos, ni las aguas del río son las mismas, incluso nosotros podemos ser esas aguas en constante fluir. Entonces, ¿será inútil buscar lo estático en lo que está en contínuo movimiento? Tal vez esta tarea es inútil, sí, pero cuántas tareas inútiles no nos llenan de placer. El amor por ejemplo. Bien podríamos limitarnos a cumplir con una tarea de reproducción, asegurar la permanencia de la raza humana y dejar de complicarnos la existencia con este tipo de tareas “inútiles”, ¿no cree usted?

Cuando sonó el teléfono yo me encontraba tan tranquila tirada en la cama, pensando en la hermosa sonrisa del tipo que fue a pintar la casa de mi mamá. Pensaba en lo cerca que pudieron estar de mí los pocitos de sus mejillas. Además pudo haber sido de lo más fácil, pues el encantador tipo me coqueteó y hasta lo vi mirarme las espaldas -o lo que con ellas se clausura- sí, y aunque R dice que "es un instinto natural que mientras no se haga consiente no hay delito que perseguir", pues…….yo tengo mis dudas.

Esto de la conciencia no deja de hacerme ruidos, si fuera así ¿Por qué sabiendo que el amor daña tanto nos auto flagelamos? ¿Recuerdan la película de Eternal sunshine bla bla bla (y su eterno título)? Joe y Clementine borraron todo lo que los unía, pero finalmente la memoria corporal, espiritual, yo qué sé, lo inexplicable impreso en alguna parte del tronco (dígase corazón, estómago, pecho, ombligo, espalda, pene, vagina) los volvió a unir. Eso pasa en la vida real señores; eso me ha pasado a mí cada que me enamoro y a pesar de que nunca me enamoro de personas parecidas y que tal vez nunca soy la misma ante el amor, me gustaría que R o algún hombre se paralizara ante mí (aha, en todos los sentidos) y me dijera que aunque la Avenida Madero sea una pasarela de la que puede escoger hasta tres mujeres –según Gillette y sus afeitadoras- se queda conmigo, y renuncie a nadar entre las piernas de otras que no sean las mías.

Mientras la Estática Heráclita llega, me pierdo en el río, ¡qué digo me pierdo¡, me ahogo y me declaro fanática de las disciplinas inútiles.
¿Alguien me puede recomendar otra?

miércoles, 24 de junio de 2009

Flores Vúlvicas



Si yo fuera varón mis flores favoritas serían las orquídeas. Siendo mujer también lo son. Partiendo por lo complicado que es el proceso orquídea- casa, después, los cuidados que se le deben brindar: un tímido riego pero que la mantenga húmeda por algunos días, música al pie de la ventana que se funda con el sol (he notado que les gusta W M) un espacio agradable a ellas, dulces palabras; para uno deleitarse finalmente con la contemplación de la flor abierta, casi hablándote, esperándote entre sus brazos, invitándote a susurrarle tus secretos con un beso. Esto puede llegar a ser muy placentero si es que a usted le dominan sus sentidos.


Por esto y mucho las orquídeas y las vaginas se parecen.


Si un hombre me dice que le gustan las orquídeas, yo lo miro con ojos de “me gustan los hombres que les gustan las orquídeas”. Compartimos el mismo gusto por eso exótico, a veces difícil de conseguir, otras veces hasta las encuentras en el crucero de la Calzada Juárez -he visto a un hombre que las vende en 20 pesos-. Uno decide con qué orquídea se queda. Mi pregunta es: ¿El gusto por las orquídeas puede agotarse en una sola?
Román, Pedro, Juan, hombre, lector, amigo, amiga, ¡Qué gran dilema¡

Vagina, escultura en bronze de Oksana Kuzmenko

martes, 23 de junio de 2009

No se pongan el saco....si son changos en cueros se ven mejor.

Sé que hay hombres lindos, especialmente si la transformación se da a la inversa. Sí . Ya quisiera yo un hombre de las cavernas; pero aclaro: ¡sólo por algunos días¡ (mejor noches). A veces no cae mal uno bien educado.

Pinche Citlali tiene razón

Efectivamente, los conejos tienen muchos conejitos, sin siquiera planearlo, sin importar quién será la madre, las madres, todo es insitnto. Por eso digo ¡¡¡estoy harta de conocer puros conejos¡¡¡ Pero claro, esto es por decir algo ya que bien pude haber dicho cerdos, pero quiero conservar en la imagen de los conejos esa ternura que a veces sentimos por los hombres. O, a caso nunca les ha pasado:

<> Ves una mandíbula hermosa, una negra cabellera, esaplda ancha sin exagerar, manos grandes, labios entreabiertos, dientes perfectos, actitud de rarito, sobriedad y desenfado en su vestir. Lo sé, parece que describo a un hommo sapiens, sí, que ya quisieras te tire de las....cabelleras....Y uno no puede dejar de pensar: "Oh, qué hermosos son los hombres".
Pasa igual con los conejos, pero cuando empiezan con hijitos por todas partes, ya quieres echarlos a la calle, regalarlo a tu mejor amiga o a tu peor enemiga. Qué importa. Tú no quieres conejitos, y menos con 29 añitos recién cumplidos. Noooo¡.
A veces parece que a los hombres (o a algunos de ellos, porque he conocido uno que otro incluyendo a Román ,que saben cómo tratarte) les falta volverse un poquito...mm... "conservadores" y por favor¡¡¡¡¡¡¡¡¡¡¡¡¡¡¡¡ no me malentiendan con esta palabra, que de por sí no me gusta, pero hago uso de ella recordando algo que dijo Guillermo Fadanelli. Si bien el amor -con todo lo que ello implica: compromiso, fidelidad, tolerancia, etc- parece para él un sentimiento imposible a los humanos, más bien cerca de los dioses que de los mortales, finalmente apeló al "conservadurismo" y renunció a todas las mujeres para dedicar toda su energía en una sola, a pesar de que esto fuera invocar a la misma muerte, sí, pero finalmente un acto más valiente ya que lo volvió más humano. ¿Por qué se niegan algunos conejos en volverse en humanos??
Saben qué?? El fin de semana saldré con Román, hoy por la mañana me marcó. Busca su salvación, parece. Meditaré, no sé que va a pasar, pero pues igual, espero algún consejo.

domingo, 21 de junio de 2009

Regalo de cumpleaños.

Hace ya un mes de mi cumpleaños y dentro de otro mes, Román (mi novio para quienes no lo sepan) estará festejando sus 29 años. Sólo dos meses nos separaban entre la vida y la nada, mientras yo estaba pateando el vientre de mi madre, Román estaba peleando con sus frustrados hermanitos por ganar su preciado lugar en el óvulo. En fin, otra historia, que si bien conozco con todo y sus cromosomas, no la voy a contar. Más bien quisiera platicar lo que ocurrió en mi cumpleaños.

El regalito: Para quienes no les he platicado cuál fue mi regalito de cumpleaños, pues…se los cuento:
Román iría a mi casa, tal vez tomaríamos algo no sé unos bayles, fumar un poco, escuchar música, salir a algún bar y terminar (como en las películas) acostaditos entre blancas sábanas, incienso como para matar alacranes, unas grandes y suaves manos en mi cadera, y dentro de mí, todo lo grande que él tiene y hasta hoy ha cabido muy bien en mi corazón: su amor.
Bueno, los planes salieron bien hasta lo de la música, porque cuando él me pidió que prendiera mi pc para poner unos videos de Portishead, invariablemente tuvo que salir el tema de mi blog. Como dócil y estúpida mujercita enamorada lo abrí, lo mostré, lo eliminé pero antes lo tuve que explicar, pues el telúrico y mecha corta de Román no entendió qué quiso decir Paco ( un amigo) con eso de “Te ví muy contenta anoche”, entonces yo le tuve que decir que, efectivamente me sentía muy contenta una noche anterior a mi cumpleaños, en primer lugar porque después de toda la ketamina y demás golosinas que me he metido en la vida, pues tengo que celebrar no haber quedado estúpida (o no tanto), y en segundo, porque Román vendría a verme. Él anda haciendo trámites para irse al DF quesque a hacer una maestría y andaba por allá desde lo de la influenza. Yo, hasta antes de lo de la música, celebraba su presencia; pero después de la felicidad que me embargó la noche anterior de hace un mes lo odié. Hizo un pancho del tamaño de él mismo (que ni siquiera cabe en su matrimonial) y todo se fue enredando tanto hasta que finalmente los amigos que amablemente me posteaban resultaron ser mis amantes. Hágame usted el favor¡¡¡¡Mfff, bueno fuera¡¡¡……más bien, ¡ bueno hubiera sido ¡ (por si lo vuelve a leer: Román recuerda que el hubiera no existe).
No sé en qué términos estamos, pero si fuéramos tacos ahogados andaríamos ya en ¼, pues la relación pareció bajar de tono en tan sólo un mes y este fin de semana todo pareció indicar que estamos apunto de nada. Más muerta que una torta muerta, así es amigos; él con una mona disfrazada de Pety Manterola, Galilea Montijo, qué se yo. Una vulgar. Me la restregó por la carota mil veces, sobretodo, porque cabe mencionar que yo soy una mujer sencilla, sexy pero sencilla, confío en mi natural encanto. Como Jeniffer Aniston cuando sale a hacer el súper. Por su puesto que este carnicero de inmediato buscó a una perra entaconada que apenas y podía respirar por quererle hacer a la Maria Antonieta. Y el muy cruel, se dá el lujo de decirme a escondidas de su putita “te extraño”. En fin amigos, disculpen este lenguaje tan alborotado, pero tengo que sacar mi pena. No sé que pase, pero Román y yo no podemos dejar de pensarnos. Ustedes recordarán que en mi anterior blog confesé alguna vez haber tenido un idilio-mental-amoroso con un amigo (recuérdese que le llevo un mes de camino recorrido). Parece que Román está tomando su revancha.